GANARÉ MI BATALLA.
Solo si, y solo sí sigo siendo el que soy.
Este tipo de ejercicios que implican una introspección, siempre me deprimen, el preguntarme por mí, por lo que soy, o lo que seré, siempre implica eternas jornadas de raskingball y de elevación de globos, mi mente en blanco encuentra más complejo definirse, que ordenar el modelo caótico que propuso Edward Lorenz y del cual surgió el efecto mariposa. Dicha mariposa revoletea en mi mente cuando pienso en mi batalla, pude aplastarla, pero entendí que cada uno de sus aleteos era un paso para comprender el porqué estoy aquí en el Caos, el principio de todo el Cosmo, en el Planeta Tierra, en el hemisferio Occidental, en América, en Colombia, en Bogotá, o simplemente en mi cama; estoy aquí para trascender, trascender en el espacio que ocupé, en el que ocupo y en el que ocuparé; trascender en las personas que me conocen y que me conocerán, ese es mi objetivo. Pero el problema no termina ahí ¿Cómo hacerlo? ¿Cómo lograrlo? Siendo diferente, y ¿Cómo logro ser diferente, si de entrada todos compartimos una diferencia, que nos hace únicos y, al mismo tiempo, humanos? (es decir iguales), ¿Cómo ganaré mi batalla? ¿Cómo trascenderé?, ¿Quiénes son los que trascienden? Tanto buenos como malos, pero ¿Quiénes son los buenos? y ¿Quiénes son los malos? ¿Qué es ser bueno? y ¿Qué es ser malo? Creo que partí desde donde no era, ya que la concepción maniqueísta nunca la tuve clara, por eso me aferré al relativismo como opción, aguas tibias o no, pero para mí todo es relativo. El mundo se segmenta arbitrariamente, pero la bipolaridad es más fácil de entender, por eso hay día o noche, hombre o mujer, felicidad o tristeza, ganadores o perdedores (aquí esta la respuesta) obvio, yo gano si alguien pierde; el objetivo es trascender, ser alguien recordado y admirado, pero ¿Quién me impide ser ese alguien?; ¿Contra quién es mi batalla? No lo sé, solo sé que alguien tiene que perder y yo no seré; a menos de que... Como dice Maturana “perder es ganar”, ¿Por qué debo ganar mi batalla? ¿Qué me motiva? Ya me rayé. Ah. Volvamos a empezar: Objetivo / trascender, enemigo / desconocido, territorio / inexplorado, método / buscar respuestas y la única forma de hallarlas es por medio de las experiencias, que se adquiere explorando el territorio, es decir debo seguir recordando el pasado, disfrutando del presente y no pensando en el futuro (porque es desconocido). Esa es mi estrategia para ganar mi batalla, sin embargo el hecho de que no piense en el futuro, no quiere decir que sea un desorientado, la focalización está planteada y la ruta encaminada, y si al final me doy cuenta de que no valió nada, pues cag*.da, eh qué digo de malas; qué me lleve el patas. No mentiras, si la idea es trascender, basta con reseñar mis grandes sucesos, como las mil y un veces que dije -te amo mamá-, como todas las veces que se lo he dicho a mis amigos y súmele todos esos obstáculos que sobrepaso para seguir viviendo, para estar en el sistema, para ser alguien, para ser libre y consumir. Así que quede claro que yo trascendí y trascenderé por ser yo, por ser Luis Carlos Manjarrés Martínez, un guajiro de nacimiento, un llanero de educación y rolo cultivado, yo trascenderé por ser yo, por ser el que todos los días se levanta con la esperanza de modificar, así sea en lo más mínimo, mi entorno; por el que cada día se levanta con ganas de aprender conocer y experimentar, por ser yo, el terco, el orgulloso, el necio, el cansón, el jodón, el dramático, el negativo y el pasado de sensible, yo trascenderé por ser lo que soy, yo trascenderé por ser el bebé de mi mamá, el niño pa’ mi pá, el nene pa’ mis hermanas, el luisCa pa’ los de la infancia, el luchito pa’ los de la U, y también por ser el maricón de siempre. Ese soy yo el que ha trascendido y lo va seguir haciendo, sí definitivamente esé soy yo el que no busca ganar una batalla, ni tampoco decir que no hay nada porqué batallar, sencillamente porque todo es relativo, y si llegase el día que evalué la guerra de mi vida en mi nicho de muerte, espero otorgarle el triunfo o el fracaso a mis batallas sólo al hecho de que seguí siendo yo. |
